EL PESCADO CUIDA NUESTRO CORAZÓN
El pescado es integrante de la dieta mediterránea, y por todos sus efectos, es muy recomendable en prevención coronaria.
Las enfermedades cardiovasculares están relacionadas con la dieta y especialmente con las grasas, que como sabemos pueden ser saturadas o insaturadas.
Cuando son saturadas (platos precocinados, leche entera, bollería industrail…), elevan el colesterol y favorecen las enfermedades coronarias. Peor en el caso de las insaturadas tienen el efecto opuesto y protegen a las arterias coronarias.
Por tanto, es aconsejable, el consumo de cómo mínimo 2 raciones semanales de pescado. Los pescados contienen minerales, yodo, vitaminas del grupo B, calcio, y en concreto los azules, importantes cantidades de vitaminas A y D, agua (75%), grasas insaturadas y proteínas.
El consumo de pescado, tiene todos estos efectos cardiovasculares, que mejoran y protegen nuestra salud:
- Produce descenso de arritmias y muerte súbita
- Controla de la tensión arterial
- Reduce el riesgo de formación de trombos
- Disminuye de los trigliricéridos y LDL – colesterol (colesterol malo)
- Reduce la incidencia y mortalidad total por enfermedades cardiovasculares
- Eleva el HDL – colesterol (colesterol bueno)